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Blog personal de José Ramón Martínez Pérez.

El Cementerio de Praga

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El Cementerio de Praga
Esta semana terminé de leerme «
El Cementerio de Praga«, una novela del 2010 del conocido autor de «El Nombre de la Rosa«, el italiano Umberto Eco.
Protagonizada por el notario y comerciante de antigüedades, Simone Simonini; un hombre de ascendencia italiana; nacido en el Piamonte hacia finales del primer tercio del siglo XIX; educado por su severo y anti-semita abuelo y un jesuita que acudía a su casa; viéndose desamparado y arruinado tras la muerte de su abuelo; comienza a trabajar para el mismo notario que leyó el testamento de su abuelo; si bien al poco tiempo viaja al Sur de Italia para participar en las campañas de unificación italianas donde participa como hombre de enlace y espía más que como soldado; hechos que les crean numerosas enemistades por lo que tiene que emigrar a París.
Cuando comienza a escribir su diario; reflejado en la novela vemos que el autor tiene un acusado desdoblamiento de la personalidad; siendo cada capítulo escrito de forma alterna por el propio Capitán Simonini y por el abate Della Piccola, una creación del priopio Simonini.
En su estancia en París Simonini se refleja como un profundo antisemita, misógeno y aficionado a la buena mesa; en París se gana la vida falsificando cualquier tipo de documento que pueda rendirte algún rédito; de esta forma participa en numerosas conjuras antisemitas, antimasónicas e incluso en el asunto Dreyfus, tanto para la publicación de libros como para servicios secretos extranjeros; hechos acompañados de los acontecimientos históricos (Guerra franco-prusiana de 1870, comuna de París – 1871) así como numerosos personajes históricos como Dumas, Freud, y otros escritores y espías que confían en sus supercherías para sus obras).
Una novela entretenida que intenta poner de manifiesto la cantidad de escritos antisemitas y antimasones publicados durante buena parte del siglo XIX y carentes de toda autenticidad; aunque si bien la orientación del propio autor dista mucho de la imparcialidad.
Una novela entretenida; aunque desde mi punto de vista lejos de la calidad de «El Nombre de la Rosa».

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