Mi Blog

Blog personal de José Ramón Martínez Pérez.

28 febrero, 2006
por admin
6 comentarios

Excursión a Colonia


Pues tal y como decía ayer, hoy hemos ido a Colonia (en alemán Kíln), en principio a ver el carnaval y también a hacer turismo, que ya que se va hay que aprovechar.
Bien, Colonia está un poco lejos de Darmstadt, hay que cruzar dos estados (para más referencia, consultar la compra de los billetes), el viaje duraba cerca de cuatro horas, así que a las 7 teniamos que estar en la parada del autobús urbano, que a las 7:30 salía el tren, hicimos un primer transbordo en Wiesbaden, pasamos por Rídesheim, donde el tren se paró 15 minutos sin explicación ninguna, lo cual iba a acarrear numerosas novedades en el viaje: En el segundo transbordo en Coblenza, cuando estábamos bajando del tren veíamos como se iba el ten con el que tendríamos que haber enlazado para llegar hasta Colonia, así que después de mucho correr por la estación hemos encontrado otro tren que iba hasta Colonia, aunque este tardaba un poco más (el que se escapó era un regional y este era un cercanías), pero bueno, mientras nos llevara hasta Colonia.
Durante todo el trayecto del tren, algunos de los que venían con nosotros iban ya disfrazados (me parece que iban disfrazados de bebé, con sus pañales, biberones, chupetones y demás parafernalia) y alegrando el viaje en el tren con cantos patrióticos y todas esas cosas, es decir, dando el espectáculo, je, je, je
Cuando hemos llegado a Colonia, nada más salir de la estación de trenes lo primero que se ve es la catedral, y la verdad es que así, la primera vez que lo ve uno, impresiona un poco, aunque desde mi punto de vista, las catedrales españolas de Burgos o Sevilla no tienen nada que envidiarle a la de Colonia.
En fin, después de admirar la catedral, lo que se veía era un montón de gente de carnaval, pero un montón es un montón, no es que esté exagerando.
En fin, hemos estado dando una vuelta, viendo los «charnaques» que habían montado para los carnavales, música, pistas para bailar, casetas con comida y bebidas (sobre todo cerveza y glíhwein).
En fin, allí hemos aprovechado para comer en estos puestos, y para ser originales, mi menú ha consistido en un «bretzel» y una «bratwurst», es decir un lacito de esos de pan y una salchicha blanca.
Después nos hemos bajado a ver la cabalgata, que la verdad es que había menos carrozas que las que vimos en Wírzburg, pero cada agrupación llevaba un montón de carrozas, y tiraban chucherías, chocolatinas, flores y hasta incluso cajas de bombones, aunque con lo lejos que estábamos no hemos podido coger nada, lástima, con lo que me gusta el chocolate.
Después hemos vuelto a unificar el grupo, que ya andaba un poco disgregado, incluso nos hemos llegado a encontrar con otros grupos de españoles que estaban dando vueltas por el carnaval…
En fin, que con todo el grupo unificado hemos ido a una calle llena de bares/pubs a seguir con el carnaval, pero ahí ya no había quien aguantase, hacía un frio… vamos -1? ó -2?, pero encima al lado del rio y todo eso, que no había quien parase, así que nos hemos metido varios en un pub que se estaba más calentico, y así hasta que ha llegado la hora de irse y volverse para Darmstadt.
A las 19:30 salía el tren que nos ha dejado en Darmstadt a eso de las 23:30, esta vez sin sorpresas, no ha habido retrasos ni nada y sólo dos trasbordos: Coblenza y Mainz.
Eso si, todavía ha habido gente con ganas de quedarse allí de fiesta y volverse al día siguiente y es que la vida de Erasmus es muy dura para algunos.
Por cierto, que en esta excursión no íbamos sólo españoles: iban también los italianos, Erick (el noruego) y un par de suecos, para que luego se diga.
Además, hemos ido bastantes que tenemos blog:
Rubén
Dani
Pablo
Erik

27 febrero, 2006
por admin
3 comentarios

Excursión a Würzburg


Hoy hemos ido de excursión a Würzburg, o en la Wikipedia. Normalmente no hacemos excursiones los domingos, pero esta semana hemos hecho una excepción porque hemos ido bastante gente, alguna de las cuales estaba de visita en Darmstadt y querían aprovechar el sábado para hacer compras.
En fin, a las 9 de la mañana estábamos ya esperando en la puerta de la residencia para ir a coger el autobús que nos llevase a la estación de trenes. El tren hacía trasbordo en una ciudad, (ahora no me acuerdo del nombre), y finalmente, a eso de las 11 de la mañana llegamos a Wírzburg, es decir, por lo menos el viaje en tren ha sido corto, que siempre se agradece. Una vez en Wírzburg, nos hemos encontrado con una amiga mexicana de Jose (el de Córdoba) que conoció en Frankfurt este verano y que vive en Wírzburg, lo cual está muy bien porque nos ha servido de guía por la ciudad (aunque la verdad es que se ha perdido un par de veces, pero es que era algo despitada).
Lo primero que hemos tenido que decidir es que queríamos ver, y ha salido el castillo, así que después de comprar los billetes para el tranvía, mientras esperábamos que viniese el tranvía hemos estado viendo la cabalgata de carnavales que ya estaba dando la vuelta por la ciudad, y un edificio donde en todo lo alto tenía el eslogan de la empresa eléctrica E.on (Wikipedia) que ahora es muy famosa por España, en fin, luego hemos codigo el tranvía que nos ha dejado en el centro de la ciudad. Hemos andurreteado un poco, cruzando el río Main, (Meno en castellano) y subiendo para ver el castillo. Desde el castillo había unas vistas muy bonitas de la ciudad, y hemos estado viendo el castillo por dentro, la verdad es que a mí me ha recordado un poco al de Salzburgo. Dentro del castillo había iglesias, pozos, torres fortalezas, dependencias que se han convertido en museos y archivos, en fin, lo que viene siendo un castillo/palacio alemán. Después nos hemos bajado por otro camino, donde hemos tenido la oportunidad de ver algunas huertas/jardines que tenían los alemanes en los alrededores del castillo. ¿Cómo están las huertas alemanas en ésta época? Pues más bien secas y un poco muertas, y es que con este clima… (Durante toda la excursión a Wírzburg, la temperatura ha oscilado entre -2?C y 0?C, o sea ni frío, ni calor…).
Total cuando hemos vuelto al centro ya nos hemos metido en todo el barullo del carnával, algunos ni cortos ni perezosos se han subido a una plataforma que había para ver la cabalgata del carnaval reservado a los políticos, ja, ja, ja, y encima no les han dicho nada. Bueno, como ya empezaba a apretar las ganas de comer, hemos estado buscando algún sitio para comer, y hemos ido a parar a un Kebab, si no somos muy originales, pero bueno, ¿qué le vamos a hacer? Después del Kebab hemos vuelto a andurretear por el centro, buscando una cafetería, y es que con el frio que hacía no era cuestión de quedarse por ahí y es que no me explico como la gente puede tener gana de carnaval con esas temperaturas. Al final hemos llegado a una cafetería que era una alegría, llena de expositores con bombones, tartas de chocolate dulces… Nos hemos sentado en una mesa, me he pedido un «chocolate» con nata, y es que aquí para los alemanes «chocolate» es lo que en España se entiende por un Cola-Cao, pero bueno, la cosa es que estaba rico, y para acompañar al Cola-Cao una tarta de Nuez que estaba bastante rica.
Allí hemos estado un buen rato, ha llegado el novio de la mexicana, que era alemán, hemos estado hablando un rato con él, y cuando ya nos hemos cansado de estar en la cafetería nos hemos ido a dar una vuelta por el centro, hemos estado viendo una iglesia (Wírzburg está en Baviera y aquí son muy católicos y en la ciudad hay un montón de iglesias, tal y como se pueden ver en la fotografía) y hemos hecho una votación para ver que quería la gente: Si volverse ya para Darmstadt o quedarse para ver el Palacio-Residencia, pero por desgracia ha salido que nos volvíamos, así que de nuevo a coger un autobús y a la estación. Mientras esperábamos hemos visto un camión que estaba limpiando los raíles de los tranvías de las porquerías que le habían caído con la cabalgata del carnaval, el camión era de lo más curioso porque tenía un doble sistemas de ruedas y el camión podía circular por los raíles del tranvía, en fin, bastante curioso.
Finalmente cogimos el tren y en un par de horas ya estábamos de vuelta en Darmstadt, eso si, haciendo transbordo en Frankfurt, aunque a mí se me ha hecho muy corto porque me he quedado durmiendo.
En Darmstadt hemos ido a tomarnos una cerveza al Schlosskeller y de vuelta a casa, que mañana hay que madrugar para ir a Colonia.
Ya seguiré contando…

25 febrero, 2006
por admin
1 comentario

¿Cómo probar una silla? o ¿Cómo comprar 7 billetes de tren?


Ayer viernes fue un día de lo más curioso, por la tarde después de comer en la Mensa nos comentó Noel que necesitaba voluntarios para su proyecto: Había que probar una silla, en fin, siendo tarea tan complicada no le pudimos decir que no.
La verdad es que creo que ese ha sido el sueño de mucha gente, bueno, sobre todo el de probador de colchones de Flex, pero en fin, lo que había ahora era una silla y no se podía elegir.
El proyecto está enmarcado dentro de domótica, en este caso la construcción de oficinas inteligentes, y la silla va equipada con una serie de sensores que le pueden decir al administrador si el usuario (de la silla) está cansado, está atento, etc. (En función de la posición en la que se siente).
La cosa es que al final nos fuimos al Fraunhofer (Donde está haciendo el proyecto, es un instituto de investigación alemán que tiene muchas sedes repartidas por todo el país, una (o varias, no lo sé bien) de las cuales está en Darmstadt), ciento y la madre (le pedían que por lo menos lo hubieran probado 50 personas) y estuvimos probando la silla de la forma más ordenada posible. La prueba consistía en sentarse de medio lado, retrepado, normal, con la espalda inclinada hacia delante y con las piernas cruzadas.
En fin, yo creo que al final la cosa salió bastante bien (tampoco era muy complicado).
Después tocaba ir a acompañar a Jose (el de Córdoba) a comprar los billetes del tren para el lunes 27 de Febrero, que tenemos la idea de ir a Kíln (Colonia, por cierto interesante lo que dice la Wikipedia del museo del chocolate), además también coincide con el carnaval, así matamos dos pájaros de un tiro. En fin, los problemas que se presentan son variados, entre ellos: Somos 34 los que queremos ir a Colonia y que Colonia no está en la misma región que Darmstadt: Darmstadt está en Hessen, Colonia está en Renania del Norte-Westfalia y hay que pasar por la región de Renania-Palatinado. Bien, pues después de muchas consultas a la página del db, se llegó a la conclusión de que la opción más barata para viajar hasta Colonia era usar los «Landtickets», bien, me parece que ya había hablado del «Schonewochenendeticket», que consistía en un billete que te permite viajar por toda Alemania en trenes regionales, pero sólo es válido los fines de semana. Los días laborables hay otra opción que son los «Landtickets», es un billete que te permite viajar por toda la región en trenes regionales, con lo cual para ir hasta Colonia habría que comprar dos billetes para las regiones de «Renania del Norte-Westfalia» y otro para «Renania-Palatinado», como cada billete sirve para 5 personas, había que comprar 7 billetes: 7 (billetes) * 5 (personas/billete)= 35 personas, vamos matemáticas de 1? de E.G.B.
Total que fuimos a la estación de trenes, fuimos a la oficina donde venden los billetes y nos tocó con un muchacho joven (yo creo que sería algún becario o alguna cosa así) que parece que no tenía mucha idea, entre eso, y nuestro alemán que no era muy allá, le dijimos lo que quería hacer, puso cara muy rara, estuvo mirando el ordenador un rato, se fue, entró a hablar con su jefe, estuvo hablando con los dependientes que tenía al lado, y volvió y nos dijo que no se podía, que los «Landtickets», sólo se pueden comprar en sus respectivas regiones, lo cual nos dejó un poco contrariados, porque iba a ser un follón comprar los billetes, ya estábamos pensando que tendría que ir dos personas una hora antes que los demás para ir comprando los «Landtickets» y un follón; pero no, al salir vimos las máquinas automáticas y trasteando vimos que en las máquinas si que se podían comprar los billetes, en fin, que lo de la eficiencia española, no es sólo en España, en Alemania también tienen dependientes con torrija. Pero ¿cuál era el nuevo problema? Las máquinas sólo aceptan tarjetas de crédito y eso iba a ser un follón, sólo había una máquina que aceptaba billetes y monedas, pero para hacer la cosa más entretenida, no aceptaba billetes de 50 Euros (que eran los que llevábamos), total que estuvimos dando vueltas por los sitios que hay en la estación (tienda de golosinas, cafeterías, librería), y sólo pudimos cambiar un billete de 50 Euros, se ve que nos verían pinta de estafadores españoles y no se fiaban.
Total que dijmos, bueno, vamos a volver a entrar a la oficina y compramos los billetes a otro dependiente. Bien, nos tocó el dependiente de al lado, le explicamos lo que queríamos hacer, y el hombre se tiró otra media hora buscándonos una oferta mejor, hasta que al final vio que no había nada más barato (se lo explicábamos, pero tenía una cabecica…), y cuando nos iba a vender los billetes nos decía que eran 4 Euros más caro, lo cual hace 4 (Euros/billete) * 14 (billetes) = 56 Euros extra, lo cual no nos parecía buena idea.
En fin, pensando, pensando nos acordamos que en el Deutsche Bank del centro había una máquina para cambiar el dinero, así que cogimos un tranvía, nos fuimos hasta el centro, fuimos a la máquina, y después de trastear un rato, y ver como la utilizaba otra persona, nos enteramos que cambiaba billetes en monedas, no billetes en billetes, total que ya que estábamos allí, cambiamos los billetes en monedas, si no me acuerdo mal, llevábamos dos cartuchos de 50 Euros en monedas de 2 Euros, que para sorpresa mía eran todas de la nueva moneda conmemorativa del 2006, lo cual me vino muy bien, porque conseguí una nueva moneda de una ceca que no tenía (la letra ‘G’), en fin, al final cogimos de nuevo otro tranvía para ir hasta la estación de trenes con 50 monedas de 2 Euros, 25 monedas de 1 Euro, 40 monedas de 50 céntimos y 40 monedas de 20 céntimos, en total unos:
50 (monedas de 2 Euros) * 8,5 (gramos) = 425 gramos
25 (monedas de 1 Euro) * 7,5 (gramos) = 187,5 gramos
50 (monedas de 50 céntimos) * 7,8 (gramos) = 390 gramos
40 (monedas de 20 céntimos) * 5,74 (gramos) = 229,6 gramos
En total 1,2321 kilos de monedas en los bolsillos, en fin, no está mal, ahora, eso sí, cada cambio, cobraba la máquina 20 céntimos. En fin, nos volvimos a la estación, nos fuimos a la única máquina expendedora de billetes de tren que acepta monedas y billetes y empezamos a comprar los billetes del tren. La mujer encargada de ayudar a la gente con la máquina expendedora al principio puso cara sospechosa, pero cuando averiguó lo que intentábamos no se paraba de reir, en fin, normal, llegó un momento en que la máquina ya no aceptaba más monedas, nos devolvió las que llevábamos metidas, en fin, un auténtico espectáculo, pero al final conseguimos los 14 billetes de tren.
En fin, ahora estoy entendiendo eso de que los alemanes tienen la mente cuadriculada, desde luego, a nosotros nos tendrían que haber dado un premio a la solución más original…

24 febrero, 2006
por admin
Sin comentarios

Dos días más

Bueno, últimamente no he hecho nada del otro mundo, por eso de que los exámenes ya están encima y hay que ir estudiando, pero en fin, algo si que hemos hecho:
Ya me ha salido la nota del examen del Bríckenkurs, y lo he aprobado y todo, con un 3.0
Ahora la gente preguntará ¿cómo es posible que apruebes con un 3.0? Fácil: Las notas en Alemania van al revés que en España: La nota más baja es un 5.0, que es suspenso, luego viene 4.0 que ya es aprobado, y así sucesivamente hasta el 1.0 que equivaldría a la Matrícula de Honor.
En fin, por lo menos ya tengo algo aprobado, que no está mal.
Luego ayer por la noche nos invitó a cenar Mayte, porque habían venido un par de amigas suyas de Navarra, así que para cenar nos prepararon embutidos, que ricos, queso, jamón, fuet, sobrasada (bueno, ésto último los trajo alguien de Barcelona, pero no sé muy bien quien), así que muchas gracias por la cena, que bien nos cuidan las visitas que vienen.
Después, fuimos a una discoteca que se llama «A5» y que está un poco lejos de Karlshof, algunos se fueron en bici y los que no teníamos combinación, fuimos en taxi.
En fin, hoy la discoteca tenía una oferta: Si los hombres iban con corbata te daban 5 ? en bebida y si las mujeres iban con tanga y lo enseñaban les regalaban 15 ? en bebida. (Que conste que a mí no me parecía bien la medida, pero bueno allá cada uno)
Bueno, pues en la discoteca al poco nos sorprendió con un show de un boy de esos haciendo el tonto un rato, vamos al más puro estilo de la Pepe Moreno.
Además la fiesta iba de tangas y estuvieron regalando algunos, en fin, una fiesta un poco rara.

22 febrero, 2006
por admin
1 comentario

Buscando otra cámara


Antes de nada, advertir que la cámara no es para mí, yo con la Olympus SP 500 tengo bastante, pero hoy he estado hablando con Jordi (el de Maspujols) y me ha comentado que se quería comprar una nueva cámara y no sabía que modelos ni nada, así que me ha pedido consejo para comprarse una nueva cámara (Lo cual es bastante peligroso, el pedirme consejo, pero vamos, una vez advertido, hemos proseguido).
Así que hemos ido a la tienda de fotografía y hemos estado preguntando. Más o menos, lo que busca es una cámara del segmento de la Nikon Coolpix 7900 (Sobre 7 MP, aunque tampoco pasa nada si tiene memos, que para qué quiere uno tanto MP, zoom óptico de 3x, etc.)
En fin, tampoco ninguna cosa del otro mundo, pero luego pasa lo que pasa, y es que en la tienda se ponen a sacar cámaras y es el cuento de nunca acabar.
Otros modelos que nos han enseñado y también nos han gustado son la Olympus Mu 600, ésta con 6 MP, zoom óptico de 3x, pero sin visor para hacer fotografías, lo cual a veces es importante, por ejemplo, cuando hay mucha luz y no se puede ver la pantalla o cuando a la cámara le quedan poca batería, etc.
Otra de las cámaras interesantes han sido una Canon, la Powershot A610, ésta con «sólo» 5 MP, aunque con un zoom óptico de 4x.
En fin, un follón, ha habido otros modelos pero éstos han sido los más importantes a ver ahora cual es el elegido.
Luego hemos ido a otra tienda de fotografía, pero nos han dicho que en ese segmento no tenían ninguna cámara (peor para ellos), y luego al Saturn (creo que ya he hablado otras veces de él), pero vamos es como una especie de Urende a lo alemán.
Allí hemos estado mirando cámaras, pero el problema de estos sitios es que son algo antiguas, con los precios antiguos, y claro, pues no salen competitivos, aunque yo he aprovechado y me he comprado un trípode de estos pequeños, para hacer pruebas, sobre todo para poder dejar la cámara apuntando a algún sitio y que haga fotografías (como la nueva cámara tiene esa opción), a ver que se me ocurre fotografíar…
En fin, a ver si alguien da algún consejo sobre alguna de las cámaras anteriores, o algún modelo nuevo similar.