Ayer me convenció Julio para ir al cine, para ver una película rarísima de la que todavía no había hablado oír de ella: «El último show» (A Prairie Home Companion), la última película del director Robert Altman, además última en todos los aspectos porque murió en noviembre, y creo que ya no puede hacer más películas.
La película se desarrolla en el medio oeste de Estados Unidos, que tienen fama de catetos en los Estados Unidos, de pueblerinos o algo así.
Trata de un antiguo programa de radio de variedades que se hace en un teatro de un pueblo, que inexplicablemente ha llegado hasta nuestros días, en plena competencia con la televisión, internet, la Playstation, y demás médios de entretenimiento actuales. Por ejemplo la publicidad la anuncia el locutor a viva voz y son más bien como la que había aquí hace 50 años.
La película es una pelícua coral, todos los personajes que desfilan por el escenario del programa tienen un papel más o menos importante en la película, y es que el reparto es un auténtico lujo: Tommy Lee Jones, Meryl Streep, Woody Harrelson y otros tantos actores muy conocidos.
La empresa cambia de manos, y los nuevos empresarios (que son de Texas) deciden tirar el teatro donde se realiza el programa radiofónico y construir aparcamientos. Así pues la película nos cuenta el último programa que emitirá la emisora.
La actuación de Meryl Streep me parece un poco forzada, sobre todo al principio, aunque todo se soluciona cuando empieza a cantar, donde demuestra que es una gran actriz.
Aunque termino sin entender muy bien uno de los personajes y no sé que pinta en medio de todo esto (parece que es una tomadura de pelo), es una película interesante, aunque en algunos momentos pueda parecer demasiado lenta, y con muchas canciones en inglés que cantan los propios artistas del programa de radio.