Tanto hablar de San Fernando y de Cádiz. El sábado fue la boda, el motivo principal del viaje a Cádiz.
La boda no empezó muy bien: en principio la celebración sería en el Arsenal de la Carraca , en San Fernando y la comida en las Bodegas Terry, en el Puerto; así que con tanto desplazamiento lo mejor para mover a los asistentes sería utilizar autobuses, pero la hora de la boda se acercaba y los autobuses no aparecían, así que al final, ante la duda, fue mejor ir en taxi que esperar a los autobuses.
La celebración fue en la iglesia del Arsenal de la Carraca, muy bonita, y luego igualmente, en autobús hasta el Puerto de Santa María, donde están las Bodegas Terry.
Allí tomamos un aperitivo en un patio, de rico jamón, adobo, y demás productos de la tierra, acompañados de cerveza, y por supuesto fino y oloroso.
Pasado un rato, hubo un desfile de varios caballos y carruajes de la bodega en el patio, muy interesante y curioso, y sobre todo fuera de lo común.
Una vez terminado, nos fuimos propiamente a la comida, que sería en un edificio cercano, para lo que tuvimos que pasar por la bodega de brandy. Curioso la cantidad de barriles que había y la disposición que tienen para el método de solera.
La comida estuvo muy rica, y muy bien servida.
Justo antes del postre, llegó otra de las sorpresas de la celebración: ?Una chirigota de Cádiz vino a actuar! Son unos que fueron los lacios hace algunos años, y que han ganado durante varios años el carnaval de Cádiz, en concreto en el 2004 con «Lo que diga mi mujer«.
Desde luego una tremenda sorpresa que nadie se esperaba, y desde luego muy divertida, nadie podía parar de reir al escuchar las canciones de los diferentes años que representaron.
Y después de la actuación de la chirigota vinieron los postres, buffet de tartas, donde nos pusimos como el quico. Y después de comer, que ya estaba bien, (terminamos cerca de las 7 de la tarde), vino el baile.
Una gran boda.
18 octubre, 2007
por admin
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