Hay veces que uno se pregunta porque hacen determinadas películas, y ésta es una de esas. Expediente X fue la famosa serie que se emitió durante los años 90 y que terminó en el año 2002. Esta película no es más que un capítulo más, un poco más largo y donde realmente han pasado 6 años, por lo que los agentes Mulder y Scully cada uno se dedican a una cosa: Scully trabajando en un hospital católico y Mulder escondido del FBI por lo mal que terminaron los Expediente X. Ahora los buscan porque tienen un caso: Una agente del FBI ha desaparecido y las únicas pistas que tienen por el momento son las que les suministra un ex-sacerdote católico, que tiene visiones y que fue condenado por pederastia.
Por supuesto también aparecen más temas en la película: Scully se encuentra obsesionada con tratar a un niño que tiene una enfermedad terminal y un grupo de rusos implicados en un caso de tráfico de órganos, cualquiera sabe con qué motivo, temas, que al final se interrelacionan entre sí.
La verdad es que hace tiempo que no veía nada de Expediente X, y me ha llamado la atención lo oscuro de los escenarios y sobre todo la suciedd que se ven en algunas de las escenas.
En fin, viendo cómo terminó la serie de Expediente X, con actores que ya no querían continuar, actores secundarios convertidos en principales e historias inconexas, creo que esta película sólo tiene sentido para aquellos fans que quieren deleitarse escuchando historis de como han transcurridos estos últimos 6 años desde que Expediente X desapareció de antena.