El domingo, aprovechando un pequeño respiro que dieron las lluvias, salí con la bicicleta. Sin madrugar mucho, y viendo que hacía un poco de solecico.
En principio quería probar unas rutas que me habían comentado los compañeros de la oficina: Hacia el sur de Dresde, en dirección hacia los pueblos de «Tharandt», así que salí de la Residencia y puse rumbo al sur; pasé la estación de trenes, subí unas pequeñas cuestas que hay por la zona de la Universidad y cuando iba a salir de la ciudad, me encontre con que era autovía y estaba prohibido. Así que empecé a seguir los carriles bici hacia la izquierda, esperando que encontraría algún desvío en dirección al sur. Pero no, los carriles bici no me llevaban a ningún sitio productivo. Al final sólo fui recorriendo barrios residenciales de Dresde, encontrándome con centros comerciales, y semáforos; muchos semáforos. Al final salí una carretera, pasé por Heidenau y llegué a Pirna, aunque entré al pueblo por una zona diferente a la del Elba, así que tuve la oportunidad de darme una vuelta por el pueblo. Subí una cuesta, que al final sólo llevaba a una zona residencial, y al bajar, me metí por el casco antiguo, viendo la iglesia, al lado de la Plaza del Ayuntamiento. Pensaba que Pirna era bastante feo, viendo la zona de la estación de trenes, pero mira por donde, resulta que el casco antiguo es bastante bonito.
Cruzé el pueblo, parándome en cada sitio que me parecía interesante, y bajé hasta el Elba, para coger el camino del Elba, que ya lo tengo bastante bien conocido y volverme directamente para Dresde. Al final, 56 km. en casi 3 horas.
19 agosto, 2010
por admin
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