El último libro que he estado leyéndome ha sido «Un Mundo Feliz«, del escritor británico Aldous Huxley, una de las tres más conocidas distopías, junto con Fahrenheit 451 o 1984.
En esta novela el futuro que presenta está formado por personas que son fabricadas en serie en laboratorios genéticos. Los niños son condicionados y clasificados en castas (Desde la Alfa hasta la Epsilon), y condicionados desde antes de su nacimiento para los trabajos para los que han sido programados.
El concepto de familia ha desaparecido por completo, y las relaciones sexuales se producen con total promiscuidad, intentando siempre quedar embarazadas, y tienen una droga, soma, que distribuyen de forma gratuita para que la gente no dé problemas y sean felices.
El año cero lo marca Ford, y el inicio de la producción en serie, mientras que los libros anteriores a esta transformación de la sociedad están prohibidos (más bien, no existen).
La llegada de un «salvaje», un individuo que vive en una de las comunidades ajenas a la civilización: Donde todavía existen las religiones «tradicionales» y se hablan idiomas como el castellano, y que por supuesto no termina de adaptarse a esta nueva sociedad tan aséptica que han creado.
Una interesante novela, escrita en una fecha que ya suena tan lejana como 1932, aunque suena muy moderna; aunque algunos aspectos «tecnológicos», parezcan vistos hoy en día un poco arcaicos.
Una idea sobre como no debería ser las sociedades del futuro.
29 noviembre, 2010
por admin
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