Ayer estuve entreteniéndome viendo esta película de Woody Allen de 1985.
La película es una divertida y absurda comedia; se desarrolla en Nueva Jersey en los años 30, en plena depresión después del crack de 1929. La protagonista es Cecilia (Mia Farrow), una joven que trabaja en una cafetería, muy fantasiosa, a la que le encanta divertirse en el cine, mientras el vago de su marido se dedica a fumar, jugarse el poco dinero que ganan y a pegarle a Cecilia en casa.
Frustrada, durante la quinta vez que iba a ver una película («La Rosa Púrpura de el Cairo»), uno de los actores de la película se fija en Cecilia y decide salirse de la película (Tom Baxter – Edward Herrmann), sí, sí, salirse de la película, un poco fantástico, pero ahí reside la gracia de la comedia.
Evidentemente un hecho tan inusual, despierta la curiosidad de la gente: Un personaje de ficción que abandona una película: productores, directores e incluso el propio actor abandonan sus actividades para ir hasta el pequeño cine de pueblo y ver qué estaba pasando realmente.
Por supuesto el actor, personaje de ficción, sólo conoce el mundo de la película, pero nada sobre el mundo real, el dinero, cómo funciona un coche o cosas similares.
Interesante y divertida comedia de Woody Allen.
La Rosa Púrpura de El Cairo
3 enero, 2011 | Sin comentarios