La semana pasada terminé de leerme «Trífero», la quinta novela publicada por el escritor madrileño Ray Loriga; una de las promesas del panorama narrativo español que surgieron a mediados de los 90; como José Ángel Mañas.
Saúl Trífero es un joven un tanto vividor, de buena cuna, de una familia nobiliaria y con escasos recursos económicos que se dedica a deambular por hoteles, salas de fiesta, con buenos resultados; algo así como un Pequeño Nicolás, de recorrido internacional y mejores antecedentes.
Un buen día en un club náutico conoció a la robusta noruega «Lotte», la que se convertiría en su mujer y le daría a su primer hijo. Lotte, proveniente de una prominente familia de atletas noruegas, bien posicionadas e incluso con una estrella en el Paseo de la Fama.
Sin embargo todo se trunca cuando Lotte sufre un accidente mientras patinaba sobre el hielo y Trífero se convierte en un huérfano. Dejando todo atrás se muda a Estados Unidos, donde entra en contacto con un físico teórico en una convención y a través de su palabrería lo ilumina para revolucionar el mundo de la cuántica; hasta que el hombre pierde los papeles; pero aún así cruzan los Estados Unidos de punta a punta, dando conferencias y charlas a (algunos) físicos, y a muchos perturbados.
Contactado por un físico rival y de primer nivel, decide aprovecharse de Trífero, para lo que mejor se le da, la palabrería, lo que lo delvolverá a Europa con un encargo.
Resumir la novela, la temática y su estilo es desde luego algo complicado; no es una temática habitual; quizás tenga algo de novela picaresca, llevada al siglo XX; tendremos que darle otra oportunidad para hacernos una idea más concreta del autor.
30 agosto, 2018
por admin
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