Esta semana terminé de leerme una de las más famosas obras de Miguel Delibes; y casi un clásico del siglo XX; popularizado por la obra de teatro homónima.

En el año 1966, Carmen – Menchu pierde a su marido, de 49 años de edad; muerto repentinamente de un ataque al corazón.

Durante 5 horas, la viuda vela el cadáver de su esposo; increpándolo y echándole en cara todos los problemas de su matrimonio: el no tener un 600 como todo el mundo en la época; los años de la guerra; las estrecheces económicas, historias de la guerra, los hermanos de Mario muertos en guerra por ser de la cáscara amarga; historias de nuestros abuelos que tantas veces hemos escuchado; pero contadas en la novela como las historias del día a día de los años 60; incluso pequeños escarceos de Menchu con antiguos amigos de la infancia a los que les va mejor la cosa, al calor de los negocios inmobiliarios en plena época del «desarrollismo».

Una novela que retrata toda una época, diferente e intimista; que pese a lo reducido del escenario, y lo repetitivo de la argumentación de Menchu; donde el magistral Delibes incluso recrea a la perfección las conversaciones maritales; engancha al lector en cada capítulo.