Tras pasar por Zamora, llegamos a nuestra nueva parada: La ciudad de León; aunque haríamos una pequeña visita también a las Cuevas de Valporquero; pero vayamos poco a poco.
Llegamos el lunes por la tarde, y tras pasar por el Hotel nos fuimos directamente al centro a dar una vuelta; empezamos por visitar la Basílica de San Isidoro, un enorme templo románico, que también incluye el Panteón Real de los Reyes de León, con frescos románicos.
Por la hora a la que llegamos pudimos visitar la Iglesia, pero no el Panteón Real, así que con tranquilidad pudimos contemplar el templo.
Después fuimos dando un paseo para llegar hasta los alrededores de la Catedral, y hasta la Plaza Mayor; volviéndonos ya al Hotel para cenar. El martes por la mañana fuimos a las Cuevas de Valporquero que merecen su propia entrada; y por la tarde llegamos de vuelta a León, y continuamos con nuestra visita turística; empezando por la Catedral; donde pudimos contemplar un impresionante portada gótica policromada de la Virgen del Dado.
Visitamos el interior de la Catedral, incluyendo el coro, aunque más parecía un museo que un templo católico.
Desde allí nos fuimos de nuevo a la Basílica de San Isidoro para poder visitar (ahora sí) el Panteón Real y poder disfrutar de los frescos románicos; algo realmente increíble; así como el museo que hay, donde pudimos ver algunas tégulas romanas.
Antes de despedirnos por completo de León, nos escapamos a visitar una pequeña iglesia: San Miguel de Escalada, un antiguo convento del que sólo queda la iglesia, con arcos de herradura de estilo mozárabe, y al que no pudimos entrar.