Leí este libro por primera vez en mis años universitarios; recuerdo que compré una edición perteneciente a un coleccionable en un quiosco. En aquella época era un libro que no tenía más de 10 años. Ahora es un libro que casi tiene los 35 años. Cuando Muñoz Molina escribió esta novela tenía 35 años. Ahora tiene casi 70 años. Casi el doble de edad. El tiempo ha pasado; las cosas han cambiado y la perspectivas como las vemos.
Manuel, el protagonista, nacido en Mágina (nombre con el que Muñoz Molina retrata a su Ubeda natal en sus novelas); es un traductor de ajetreada vida que vive entre países y cielos, de cumbre en cumbre y de reunión en reunión. Pero evoca su infancia y juventud en Magina, de la que siempre quiso salir. Unidos a él muchos personajes del pueblo de las décadas anteriores que se entretejen y marcan de una forma u otra la vida del protagonista.
Empezando por Don Mercurio, un joven médico que llegó a Mágina en 1870, huyendo del atentado contra el General Prim, que se enamora de una mujer casada que termina por ser emparedada y momificandose en la casona familiar.
Los abuelos y bisabuelos de Manuel están marcados por las desgracias nacionales, desde la guerra de Cuba donde participó como soldado (su bisabuelo), y la guerra civil, que vivieron sus padres siendo niños. A raíz de estos, pese a que su padre pudo prosperar al comprar su propia huerta y no depender de jornales ni de arriendos la vida trabajando de sol a sol y vendiendo los productos en el mercado no es fácil; por lo que el pobre Manuel tiene que echar una mano. Quizás de ahí vengan sus ganas de salir de Mágina; hecho que se realiza cuando en los años 70 se va a Madrid a cursar sus estudios universitarios.
Posteriormente los años 80 son años de descubrimiento, de peregrinaje por el extranjero donde tiene ocasión de re encontrarse con Nadia Galaz, la hija nacida en Estados Unidos del Comandante Galaz, militar republicano en los primeros días de la guerra.
Curioso e interesante el envejecimiento de este libro; la visión de los años 60/70 por un talentoso escritor de 35 años a principios de los 90. Una historia para la que los escritores de hoy quizás carezcan, o al menos sea una muy diferente perspectiva.