El pasado 3 de agosto; para empezar bien el mes de vacaciones, hubo una etapa extraordinaria en el C.C. Tosiria: La subida al Veleta; ahí es nada; la carretera más alta de Europa, a nuestra entera disposición.
Como otras veces, a las 6 de la mañana quedamos con Rivera para cargar las bicicletas y a las 6:30 estábamos saliendo de Torredonjimeno rumbo a Granada; paramos a desayunar en la Yedra; para descargar luego en Cenes de la Vega.
Y desde allí; subidos en la bicicleta, y comenzamos a subir; poco a poco vamos dejando atrás las cotas: 1000 metros, 1250 metros, 1500 metros; empezando por Cenes por la carretera antigua hasta que se une con la nueva y continúa ascendiendo; primero por la zona de los tres carriles, para llegar luego al tramo de curvas; al final del cual paramos de unos de los restaurantes al borde de la carretera que hay; y desde allí para adelante por la zona nueva con curvas más amplias; compartiendo la carretera con la subida al Veleta que organizan todos los años corriendo.
Poco a poco llegamos a Pradollano y desde allí continuamos por la carretera que pasa por el CAR, el albergue y continúa hasta el albergue universitario, llega a la barrera, y aún algunos continuamos unos pocos kilómetros más.
Los que más ganas tenían de subida vinieron preparados con la bicicleta de montaña, por lo cual los obstáculos de la carretera a partir de la barrera no era problema: Había algunos tramos donde el asfalto se había perdido y estaba de tierra; aunque aún así, me atreví a subir hasta más o menos la altura del telesilla «Stadium», donde ya decidí darme la vuelta para tampoco llegar muy tarde a comer.
Al final, 80 km. en 4 horas y media, con 2120 metros de desnivel y 3000 kilocalorías gastadas; aunque para reponer energías llegamos al Guerra en Huetor Vega, donde ya paramos el año pasado; allí nos arreglamos; se pegó un baño el que quiso y repusimos bien la energía gastada; antes de volver a montarnos en el autobús y descansar un poco de vuelta a casa.