Este fin de semana aproveché para ver una película argentina que últimamente he estado escuchando mucho: «Relatos Salvajes«, del director Damián Szifron; es un conjunto de seis cortos de humor negro con muchísima violencia gratuita:
– Un avión que se estrella lleno de pasajeros que todos tienen en común el hecho de haber conocido (y en gran medida fastidiado) a Pasternak; un hecho muy similar al accidente acontencido el mes pasado en los Alpes.
– Una cocinera y una camarera de un bar de carretera que ante la llegada de un empresario con pocos escrúpulos y presentándose a político (parece que ese perfil no es único de España), deciden darle una lección que nunca olvidará.
– El conductor de un flamante nuevo Audi que se pica con el conductor de una vieja tartana en una carretera solitaria cruzando un territorio semi-desértico argentino; tiene que parar por una rueda pinchada; momento que el segundo conductor decide tomarse su revancha.
– Bombita: Simón; un ingeniero de minas, experto en explosivos comienza a tener problemas con el departamento de tráfico de Buenos Aires: no dejan de llevarse su coche, teniendo que pagar multas, recargas; llegando tarde a casa con los consecuentes problemas; hasta que un buen día pierde los nervios y decide tomarse la justicia por su cuenta.
– Santiago; un joven que al llegar a su casa después de una noche de fiesta despierta a sus padres porque ha atropellado a una mujer embarazada al volver a casa. El padre; que disfruta de una situación económica desahogada; ayudado por su abogado decide usar un cabeza de turco; untando a todo funcionario que haga falta.
– Romina, la Tigresa, durante la celebración de su boda descubre que su recién estrenado marido lleva bastante tiempo engañándola con una compañera del trabajo y que está invitada a la boda; en un ataque de histeria decide demostrar quien manda.
Una serie de cortos muy divertida, a la par que violenta; violencia gratuita que demuestra la bestia que habita dentro de cada uno y que puede saltar en el momento más inoportuno con consecuencias incontrolables.
Muy entretenida y recomendable.