El pasado fin de semana pasado, el sábado, aprovechamos para ir a esquiar, en principo con varios compañeros de Valeo: Irving, Damien y Gildas; a las 7 salimos de Martos en dirección a Jaén a recoger a Irving y desde allí a recoger en Granada a Gildas. Aparcamos en Pradollano y después de alquilar el equipo y comprar los forfaits, nos subimos en el telecabina a empezar a esquiar. Primero bajamos algo en Borreguiles; para luego subir buscando el Veleta y la Laguna de las Yeguas.
En abril, ya plena primavera, hace más calor, así que la calidad de la nieve no es igual que en invierno; así que en las cotas más altas es donde mejor se mantiene la nieve caída en las últimas semanas. Intenté seguir a los franceses, pero el nivel que tienen era muy alta para poder mantener su ritmo; así que después de un par de bajadas, llamé a Juanele y a Álvaro, que, casualidades de la vida, habían subido a esquiar, y con ellos empezamos a bajar algunas cosas por la zona de Borreguiles, Loma de Dílar y el Águila. Ellos tenían pensado comer al terminar el esquí; así que cuando me entró hambre, paré para comer un poco; recogíendome Álvaro al par de bajadas.
Era ya tarde, y la nieve estaba ya un poco derretida, por lo que no era muy cómodo esquiar; así empezamos a bajar, por el Águila y luego Maribela para volvernos ya.
Mientras terminaban de bajar los franceses, fuimos a tomarnos un café (y algunos a comer), a esperar para volvernos ya todos, cada uno a su casa.
Un buen día de esquí; con oportunidad de reencontrarnos varios compañeros del Colegio Mayor

Ayer viernes aprovechamos para juntarnos en Jaén para cenar con Mari Carmen y Antonio así como con AJ e Irene; teníamos que buscar una escusa, para darles los regalos de cumpleaños a Mari Carmen y Antonio que había sido hace poco.
Así que quedamos por la zona del Banco de España, donde AJ nos esperaba comiendo caracoles e Irene nos puso al día de la boda de su hermana, para irnos luego a una cadena de bares ¿gallegos? donde estuvimos cenando unas tapillas con sus cervezas.

Ayer jueves celebramos el cumpleaños de Marta (y también el de Jesús); así que Manuel Jesús nos dijo que había pensado hacerle una fiesta sorpresa, así que nos citó en el Charlote para que fuésemos apareciendo antes de que ellos llegaran.
Yo me los encontré cuándo iban camino de lo de Antonio, así que casi le fastidio la sorpresa, pero afortunadamente, la sangre no llegó al rio; y sí que pudimos sorprender a Marta.
Entre todos le hicimos muchos regalos: Desde un kit de maquillaje, unas gafas, unos colgantes e incluso un par de libros (iguales).
Y de postre, aunque los de Antonio están muy ricos, Lucía nos sorprendió con una tarta casera; que aunque no tenía tanto chocolate como la del cumpleaños de Manuel Jesús, estuvo muy rica.
¡Feliz Cumpleaños, Marta!