Ayer aproveché un ratillo para ver «El Gatopardo», una película franco-italiana de 3 horas de duración (aunque depende de la versión que uno consiga), dirigida por Luchino Visconti en 1963.
La película está protagonizada por Burt Lancaster en el papel del Príncipe Don Fabrizio Salina, un noble siciliano que se envuelto en los sucesos históricos de la unificación italiana de 1860. Sin una posición claramente definida, su sobrino Tancredi Falconeri (Alain Delon) si decide apostar decididamente por los revolucionarios viéndolo como una oportunidad que no puede dejarse pasar, un acontecimiento histórico que lo cambiará todo. En la película se mezcla la vida familiar del príncipe, junto con la revolución, amores y desamores, líos, en una perfecta trama. No obstante es considerada como una de las mejores películas de los años 60 del cine europeo.
Espectacular también Claudia Cardinale en el papel de Angelica Sedara, la prometida de Tancredi Falconeri o curioso ver a un jovencísimo Terence Hill, en el papel de militar y amigo de Tancredi.
Una gran película que me recomendó Julio hace ya bastate tiempo, cuando todavía estábamos en el Colegio Mayor y que aún tenía pendiente.