Un problema muy frecuente en los iPhone después de algún uso es que deje de cargar. ¿Cable roto? ¿Conector roto? ¿Defecto de la batería? Enviarlo a reparar…
Hoy, mi amigo Pani me ha enseñado un truco muy antiguo: Intentar limpiar el conector del móvil: con un objeto fino (preferentemente no conductor para evitar cortocircuitos con los pines del conector), puede procederse a sacar todas las «pelusas», restos de fibras de tela, pelos que han podido acumularse en el conector a lo largo de los meses.
Y ahora, el móvil carga a la primera; nada de andar probando varias posiciones y varios conectores hasta que conseguía que uno funcionase.
iPhone que no carga
29 diciembre, 2014 | Sin comentarios