
Aprovechando esta festividad local de San Amador, que mejor momento que escaparse a Jaén; mientras todo el mundo trabaja y poder visitar el Museo Íbero; del que hace algunos años se habló bastante en prensa; incluyendo la inauguración por parte de S. M. El Rey Felipe VI.
Por suerte; aunque me temo que es la tónica general sin que tenga nada que ver ni con la pandemia ni con ser un día laborable; el museo estaba casi completamente vacío; apenas 3 visitantes; los mismos que vigilantes. En la planta inferior había una exposición de fotografías de las minas de Linares y tres leonas íberas e íbero-romanas de una exposición temporal. Una de las cosas más interesantes es poder ver el laboratorio de conservación y restauración donde un par de arqueólogas estaban trabajando con dos piezas de cerámica.
En la primera planta también una exposición temporal de las piezas de una campaña arqueológica de los años 80 en una atalaya por la zona de Mengíbar y sobre todo la sala con la exposición permanente y principal donde tienen las piezas mas conocidas que han salido en la provincia de los yacimientos del cerrillo blanco (Porcuna), Cástulo (Linares) Puente Tablas, Atalayuelas y el yacimiento mortuorio de Toya (Peal de Becerro)
Algo novedoso e interesante; aunque una lastima la inversión de tanto dinero para un museo que aún está medio vacío. Esperemos unos años a ver cómo evoluciona la colección.