La boca la Pescá es una de tantas montañas que hay en Sierra Nevada, y tiene un buen recorrido para hacer una escursión de senderismo, así que para hoy Repiso ha organizado una excursión a la que me he apuntado.
En principio íbamos a hacer otra ruta, a la Vereda de la Estrella, pero un problema con los horarios de los autobuses ha hecho que tengamos que cambiar de ruta. Como el único autobús disponible que teníamos era el de La Zubia, nos hemos montado en el autobús y para alante, que esta ruta ya la conocíamos de otras veces.
Tal y como la última vez, la excursión ha sido conjunta con el Santa Fé.
A las 10:20 estábamos llegando a La Zubia, 5 km. más abajo de donde empieza la ruta, cerca de una urbanización llamada Cumbres Verdes. Una vez que hemos llegado allí ya hemos dejado la carretera y hemos cogido un camino de tierra, con una pendiente más suave de la que habíamos tenido hasta entonces y por un bosquecillo de pinos. Una vez que termina ese camino, proseguimos más alante hasta llegar a la fuente el Hervidero, donde también hay un restaurante. Allí hemos aprovechado para rellenar agua. Siguiendo un poco más alante ya llega un punto donde se bifurcan los caminos: Uno hacia la derecha hacia la «Boca la Pescá» y otro a la izquierda hacia el Trevenque
Allí nos hemos separado en dos grupos: El primer grupo en el que iba y el segundo grupo que estaba descansado y cuando han ido a buscarnos ya no nos han podido alcanzar y se han tenido que quedar por esta zona, haciendo tiempo.
La subida al pico no es difícil, siguiendo por caminos se llega hasta la ladera de la montaña misma. Es curioso la poca vegetación que hay por el camino, y la nieve que todavía queda. Aunque eso sí, en el mismo pico las laderas estaban llenas de pinadas. Cuando hemos llegado a la ladera del pico hemos pasado de largo del camino, y cuando hemos ido a echar mano habíamos llegado al final del camino, y sólo nos quedaba un cortafuegos para subir hasta el pico. ¿Cuál es el problema de los cortafuegos? Que la pendiente no es moco de pavo…
En fin, después de no pocos esfuerzos pudimos llegar hasta la cima, donde está el refugio y nos pusimos a comer, que no había tiemo que perder, que el autobús de vuelta no esperaba.
Interesantes las vistas de Granada. Se veía Camino de Ronda como si estuviese al lado.
Luego de vuelta, lo bueno de la vuelta es que todo era para abajo. Y como para abajo, todas las piedras ruedan era pan comido.
De nuevo a deshacer todo el camino, hasta llegar a la Fuente del Hervidero, esta vez atrochando (lo dicho, para abajo todas las piedras ruedan), y luego hasta Cumbres Verdes a esperar el autobús. A las seis menos cuartos ya estábamos de vuelta en Granada. ?Pan comido!
Senderismo: La boca la pescá
15 enero, 2007 | 2 comentarios
Pingback: Mi Blog » Blog Archive » ¿Qué pasa cuando le tiras una bola de nieve a una cámara?
Pingback: Mi Blog » Blog Archive » Comida en Cumbres Verdes