El Jueves Santo, salí con la bicicleta de montaña para probar un poco el arreglo de la bicicleta: Salí por la vía verde porque el tiempo tampoco acompañaba mucho y era posible que lloviera. Del arreglo, la verdad es que ninguna queja, tan sólo el desviador delantero parece que no entra muy bien en la corona mediana, y el freno delantero todavía tiene las zapatas nuevas por las que aún no frenaba bien: Aún necesitaba más kkilómetros y más frenadas hasta que todo empezara a ir otra vez bien. Al final, 52 km. en dos horas, 250 metros de desnivel y 1400 kilocalorías.
El Viernes Santo salí con la bicicleta de carretera: Martos – Los Villares – Puerto – Fuensanta y vuelta a Martos, una étapa clásica con un bonito puerto de montaña, y desde el que se podía disfrutar de las cimas de la Pandera cubiertas de nieve… Y mientras tanto Sierra Nevada cerrada… 49,7 kilómetros en total, en dos horas y 13 minutos con 940 metros de desnivel y 1500 kilocalorías gastadas.
y finalmente el Domingo Santo, otra etapa con un puerto: Las Casillas – Pantano – Villarbajo – Alcaudete – Venta de Pantalones – Martos; 58 kilómetros en dos horas y tres cuartos, con 1160 metros de desnivel y 1660 kilocalorías gastadas.
Tres etapas, muy diferentes entre sí, pero perfectas para ir empezando la temporada.

Estas vacaciones de Semana Santa, cuando la lluvia dió un respiro, aproveché para coger un poco la bicicleta, y hacer una etapilla sencilla: Martos, bajar a la Higuera de Calatrava, para luego subir a Santiago, 5 kilómetros más, y luego bajar desde Santiago hasta Lendínez para volver hasta Martos.
En total, 47,7 kilómetros en algo menos de dos horas, 630 metros de ascensión y 1200 kilocalorías gastadas. Un paseíllo para echar el rato.