Esta semana terminé de leerme «El Invierno en Lisboa», una novela de Antonio Muñoz Molina de 1987.
Es una novela negra, inspirada en el cine de los años 50, sobre músicos de Jazz, similar de alguna forma a «Beltenebros«, en la estructura y ambiente.
En Sansebastián, en el local Lady Bird donde toca Santiago Biralbo, un pianista de jazz junto con su amigo Billy y Floro (propietario del local). En medio aparece Lucrecia, casada con Toussaints, un traficante de libros antiguos y pintura, de la que Biralbo se enamora y con la que comienza a tener una aventura hasta que ella desaparece por centro Europa unos cuantos años.
Todos vuelven a reencontrarse en Lisboa unos pocos años después, en un ambiente muy diferente; donde Toussaints busca a Lucrecia por un cuadro desaparecido al que quieren echarle el guante para poder venderlo y hacerse con el dinero.
Una entretenida novela, magistralmente escrita como Muñoz Molina sabe hacer, con una ambientación que nos lleva a los tugurios del Jazz, donde se mezclan desde los restos del imperio colonial portugués hasta músicos negros de jazz, con una literatura tranquila y pausada.