Esta semana terminé de leerme el que fue Premio Planeta de 1997, del que por entonces era el prometedor escritor Juan Manuel de Prada, después de los anteriores éxitos que tuvo en 1995.
En esta novela el profesor Ballesteros, un joven doctor de 29 años viaja hasta Venecia para estudiar un cuadro de Giorgione: la Tempestad. Todo se complica cuando es el único testigo del asesinato de un conocido falsificador de la ciudad y se ve inmiscuido en una investigación y juego entre Gabetti, el director de la Academia de Venecia y su padrino en la ciudad, su hija Chiara de la que se enamora, el inspector Nicolusi y la antigua amante del muerto. Un juego donde se mezclan ricos y caprichosos por el arte, trafico de pinturas, amores imposibles en una ciudad, objetivo de tantos turistas y que demuestra no ser tan grande como se pueda pensar a primera vista.
20 años han pasado ya desde la publicación de esta obra. Cuando la comenté con un amigo me comentó que el estilo de Prada era «repelente»; quizás por el uso recargado y rico de su prosa, sin embargo vi que en esta novela no hacía tanta demostración de su virtuosismo literario como en la posterior «La Vida Imposible». Una novela interesante, policiaca a su modo, hacia mitad de la novela me llegó a enganchar realmente, aunque el ritmo decae hacia el final.
La Tempestad
6 febrero, 2018 | Sin comentarios