Hoy tenía ganas de tomarme unas patatas a lo pobre, antojos que le dan a uno, así que dicho y hecho, pero claro, y como parecía poco he decidido acompañarlo con unas salchichas alemanas, en concreto con las que se ven en la fotografía, que son «weiíwurst«, o sea, salchicha blanca», que son típicas de Baviera.
El problema ha sido que cuando he ido a echar mano me había pasado y había patatas para parar un tren, así que he decidido llamar a uno de mis compañeros de piso y que cene conmigo.
Vamos una cena hispano-alemana en todos los conceptos, salchichas alemanas, patatas a lo pobre españolas (con aceite de Martos, por supuesto) y dos comensales: Un alemán y otro español.
Por cierto, ya que estamos, vamos a dar la receta de las patatas a lo pobre:
– Se cogen las patatas, se pelan y se cortan en rodajas.
– Se coge una cebolla, se pela, se corta por la mitad y cada una de la mitad en rodajas también. (Si hay muchas patatas, pues se cogen más cebollas, esto tampoco es un problema)
– Opcional: Se coge un pimiento y se pica.
Una vez que se tienen todos los ingredientes se echan en una sartén, se cubren con aceite; tampoco hace falta que se cubran todas las patatas, pero por lo menos la mitad sí, es decir, hace falta bastante aceite, que luego se puede volver a aprovechar.
Luego se pone todo a fuego lento y se dejan que se fría. Importante: El aceite no tiene que estar fuerte porque si está fuerte salen patatas fritas y ese no es el objetivo.
Creo que también reciben el nombre de patatas panaderas y tengo que decir que casi todas las recetas que he encontrado por internet tienen otra forma de hacerlas, en fin será eso de que cada maestro tiene su librillo.
18 mayo, 2006
por admin
1 comentario