La semana pasada terminé de leerme este libro de Paul Auster, después de que una compañera de trabajo me hablara de la última obra que había publicado, 1 2 3 4. Investigué un poco y pregunté a amigos; así que al final me hice con varias obras, y cogí al azar esta, El Palacio de la Luna, que resultó ser su sexta obra, publicada en 1989.
El protagonista es Marco Stanley Fogg, un joven universitario en 1969 que nos cuenta su infancia y adolescencia de forma retrospectiva, criado por su tío, cuya única herencia fue un lote de 1492 libros; no llegó a conocer a su padre, mientras que su madre murió siendo él joven, atropellada por un autobús. La indemnización le permite ir a la universidad, pero en sus últimos años comienza a pasar dificultades financieras que lo convierten en un vagabundo.
Salvado por una chica de origen chino, Kitty Wu, que se enamora de él y consigue un trabajo cuidando o mejor como secretario de un viejo cascarrabias cerca ya a su muerte. Thomas Effing lo toma como su secretario y cercano a su hora, le cuenta la rocambolesca historia de su vida, pintor a principios del siglo XX, viajó a París para entrar en contacto con las corrientes modernistas, volvió a Estados Unidos para desaparecer en Utah en el desierto, hacerse pasar por muerto y salir con una nueva identidad, dejando atrás una mujer y un hijo. Administrando su dinero consigue hacer una pequeña fortuna y emigrar a Europa para poner distancia sobre su pasado; regresando a Estados Unidos, ya paralítico a finales de los años 30, poco antes de la caída de Francia en la II Guerra Mundial.
Un libro que me ha sorprendido muy gratamente, en especial para ser la novela con la que descubro este autor; una narración que engancha, fácil de leer y unas historias interesantes. Espero que pronto caigan más.
El Palacio de la Luna
14 diciembre, 2018 | 1 comentario
Pingback: Brooklyn Follies - Mi Blog