Cuarta película de la cuarentena: Puñales por la Espalda (Knives Out); dirigida por Rian Johnson (Rogue One), una película detestivesca, al más puro estilo de Agatha Christie, pero con un puntillo de humor negro que la hace muy divertida.
El investigador principal es Benoit Blanc (Daniel Craig) un detective privado; que exactamente no sabe quien le ha contratado para investigar la muerte del exitoso escritor de 85 años Harlan Thrombey (Christopher Plummer). Entre los principales sospechosos, toda su familia, encabezada por sus dos hijos: Linda Drysdale (Jamie Lee Curtis), que se dedica a un negocio inmobiliario, y Walt Thrombey (Michael Shannon – Boardwalk Empire), dedicado a la edición de los libros del viejo. Su ex-mujer, Joni Thrombey (Toni Collette). Al final todos viven al calor de la fortuna de Harlan y de sacarle su dinero.
Blanc comienza a interrogar a cada miembro de la familia, para intentar reconstruir que pasó realmente la noche anterior al suicidio de Harlan; siendo su enfermera, Marta Cabrera (La hispanocubana Ana de Armas); la encargada de medicar a Harlan y realmente su confidente; la única que no le sacaba el dinero.
Blanc aparentemente es despistado y sin fijarse en los detalles (casi más desastre que el Teniente Colombo), aunque con más clase y mejor vestido; siempre acompaña a la pareja de la policía encargada de la investigación. Pequeños matices en las declaraciones de cada uno, permiten a Blanc reconstruir que pasó realmente la noche del cumpleaños de Harlan, los motivos que tenía realmente cada uno y lo que sacaban con la muerte del viejo; demostrando al final que Blanc es mucho mejor investigador de la impresión que da.
Una divertida comedia; ideal para reír en estos días de confinamiento, con un reparto de actores muy conocidos; muchas veces tantas primeras espadas suelen llevar a películas no muy buenas; pero no es este el caso: Una estupenda comedia con algo de humor negro, con una trama entretenida de seguir. Ideal para desconectar y pasar un buen rato.