Pues una vez terminada la feria; teníamos que volver el hilo de turismo; y una buena visita a Martos no puede terminar sin una subida a la Peña; así que el domingo por la tarde; cuando pasaron las horas centrales del calor; cogimos el coche Nelson y yo y subimos hasta la ermita; dejamos allí el coche y comenzamos la subida hasta la Peña.
Llegamos al pico; a la mesetilla y disfrutamos del fresco que empezaba a soplar; de las vistas; y visitamos las ruinas del castillo y del aljibe que aún se pueden visitar. Nos echamos alguna fotografía; antes de deshacer el camino y bajar de nuevo para coger el coche y volver a la casa.